Sin duda las ultimas 3 temporadas de producción de nueces han sido duras. Algunos de los problemas más relevantes fueron la escasez hídrica, alta salinidad del agua de riego, falta de mano de obra en cosecha, y precios que no acompañan.

Pero este rubro continúa siendo el segundo más plantado a nivel nacional, con 43.327 hectáreas, después de la uva de mesa que ocupa el primer lugar con 45.489 hectáreas (fuente: ODEPA, 2020). Existen buenas razones para continuar con el rubro como la posibilidad de mecanización de las labores (poda, cosecha, aplicaciones foliares y hormonales), un mercado crecientemente demandante por este tipo de frutos, un precio relativamente estable y un producto de altísima calidad por las condiciones edafoclimáticas de nuestro país. Junto con ello, considerar que una buena parte de la superficie se encuentra en etapa de desarrollo o replantación con porta injertos tolerantes y resistentes.

Haciendo frente al cambio climático:

Los desafíos que se vienen son varios. En primer lugar, la incertidumbre que genera el cambio climático que ha provocado una disminución abrupta de las precipitaciones, especialmente en la zona central y norte. Por otro lado, el clima ahora es errático. Se generan heladas en épocas muy sensibles como brotación y floración. Junto con ello el aparecimiento de nuevas enfermedades relacionadas con el stress como los hongos de madera que provocan la pérdida de gran parte de las yemas fructíferas del siguiente año.

Ante una crisis, la oportunidad. Se están empleando cada vez más tecnologías y programas de asesorías que buscan maximizar la eficiencia en el uso de agua. Riego subterráneo, uso de polímeros, riego deficitario controlado, uso de plataformas satelitales, son algunos de los esfuerzos conjuntos entre el mundo privado, publico y académico por lograr mantener el rubro de los nogales competitivo. Por otro lado, la UC Davis ha logrado desarrollar nuevas variedades más adaptadas a las condiciones de stress hídrico y que están disponibles en el mercado, como Ivanhoe. Además, ya se cuenta con estrategias para controlar la incidencia de hongos de madera en nogal.

La mecanización, cada vez más indispensable:

El costo de mano de obra puede llegar a ser más del 50% de total de costos de producción del nogal. El segmento más afectado son los pequeños agricultores, quienes dependen más de la mano de obra contratada para diversas labores como la poda, la cosecha y el proceso postcosecha. Con el apoyo de INDAP ha sido posible que los pequeños productores de nueces mecanicen sus labores, en especial las labores de postcosecha (despelonado, secado, calibración), y con ello conseguir un producto más uniforme.

El suelo, el recurso olvidado:

Por muchos años las estrategias fueron orientadas a intervenir la parte área de las plantas (abonos foliares, reguladores de crecimiento, bioestimulantes), y muy poco o casi nada a mejorar las condiciones del suelo. Por esta razón, el manejo intensivo de huertos de nogal de altas producciones (sobre 6000 kilos/há), ha ido en desmedro de la calidad del suelo, principalmente por las altas concentraciones de fertilizantes sintéticos y herbicidas que recibe. Hoy en día, la mentalidad es diferente. El suelo es el gran capital de la agricultura. La materia orgánica genera beneficios enormes en las propiedades físicas, químicas y biologías de éste, incluyendo la mayor retención de humeddad. Se deben establecer programas de manejos de enmiendas orgánicas, y agregarlo al presupuesto del año. El uso de compost, manejo de cubierta vegetal, mínima labranza y uso de  ácidos húmicos, son estrategias que se están empleando en los programas regulares.

Los replantes, una carta segura:

El principal problema patológico del nogal es el decaimiento y/o pudrición de cuello y raíz, ocasionado por el agente Phytophthora spp. Se han cometido errores millonarios en cuanto a los manejos de replantaciones y riegos. El uso de portainjertos tolerantes y resistentes, entre ellos Vlach – RX1 y VX211, ha ido tomando fuerza desde hace unos 5 años con resultados claros en la sobrevivencia de las plantas en condiciones de replante.

Nuestras tareas…

Es fundamental para levantar estas limitantes, que se generen lazos cercanos entre los agricultores y los asesores técnicos. Ahora más que nunca el desafío es compartido. Generar políticas publicas que alianza público-privada en torno al rubro de las nueces; establecer programas de transferencia tecnológica para difundir nuevas tecnología; establecer nuevos huertos con nuevas variedades y portainjertos; implementar nuevas tecnologías de manejos orientadas en la sustentabilidad de los suelos; son algunos de los esfuerzos conjuntos que debemos realizar para que el rubro de las nueces perdure en el tiempo y para que Chile siga  produciendo las mejores nueces del mundo.

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